Capítulo uno: ‘Solo tú’

Abro los ojos lentamente. Mi mirada se dirige rápidamente hacía sus ojos. Están cerrados. Duerme. Respiro tranquila. Se ha destapado un poco. Me deshago de las sábanas con olor a desinfectante y me dirijo hacía ella. Murmuro su nombre, sin dejar de sonreír. Sus pequeñas manos buscan la mía, que, después de taparla, ha sido robada por su mano derecha. Mi dedo índice lo envuelve su manita. Miro la mesita de noche, hay una nota: ‘Esta noche te quedas sola, tu hermano me necesita en casa. Si pasa algo, llama a las enfermeras. Volveré mañana a las nueve y media, después de dejar a tu hermano en el colegio. Descansad, princesas. –Mamá.’
Una enfermera entra en la habitación. Se acerca hacía nosotras, algo preocupada. Me acaricia el pelo mientras recoge mi cena. Me había quedado dormida, estaba demasiado cansada.
-¿Cómo está la niña? –Me pregunta.
-Según el doctor, está perfectamente.
-Y la madre… ¿Cómo está? –Cierro los ojos, mientras bajo la mirada.
-Bien. –Respondo, fría. Volviendo a mirar a la pequeña niña que mueve sus piernas y manos, sin sueño.
-¿No sabes nada de él?
-Nada de nada. Hablamos a escondidas, pero… -Mi barbilla tiembla, pero logro pararla y aguantar las lágrimas en los ojos. –No sabe ni que ha nacido.
-Deberías decírselo. –Me aconseja ella. –Sé que es difícil, pero debe saberlo.
-No puedo. –Me niego. -¿De qué serviría? De nada. –Le explico. -No le dejarían verla.
A aquella enfermera le brillaron los ojos. Entendí el por qué una hora después. Ella miró de arriba abajo a la pequeña, sonrió mientras me decía que tenía mi misma sonrisa.
-Los ojos son de él. Verdes… -Sonrío. –Algo brillantes con la luz del sol, se le humedecen.
-Lo conoces bien. –Asiento con la cabeza.
-Al fin y al cabo… Es su padre.
-Estoy segura de que él también te echa mucho de menos, Nadinne. –Me sonríe, aunque sabe que a mí me cuesta hacerlo, salvo cuándo tengo a esa pequeña entre mis brazos. –Buenas noches.
-Buenas noches, gracias. –Ella sale de la habitación y cierra la puerta.
Miro mi móvil. Ningún mensaje por parte de Kyle. Miles de comentarios en la foto que hay colgada en el Facebook, en la que sale ella entre mis brazos. Marta, Claudia, Paola y los demás me han llenado a WhatsApps. Parece que, cuando todo cambió, el grupo también lo hizo. Pero eso pasó hace meses.
Dejo el móvil dónde estaba y me pongo al lado de la cuna. Aún no se ha dormido. Empiezo a tararear alguna canción. Sonríe. Paso de nanas y de cuentos, Kyle y yo nunca fuimos nada tradicionales, siempre nos íbamos a lo diferente, a lo original, a todo lo inapropiado con tal de que nos perdieran de vista.
-Así que corre, corre, corre, corazón, de los dos tú siempre fuiste el más veloz… -Tengo un nudo en la garganta. Ella reprocha. –No te gusta la canción, ¿eh? –Le acaricio la cara. ¿Probamos con otra, pequeña? –Sus ojos siguen fijos en los míos. Su mano cogida al mismo dedo, creo que no quiere que me marche. A decir verdad, yo tampoco quiero apartarme de su lado. –Me preguntaba, cómo sería besarte, cómo sería llamarte, cómo sería llevarte de la mano a nuestro parque. Y me preguntaba, si jugarías al futbol como él, si te parecerías a mí, y si ella te cedería su dulzura también. Ahora lo sé, sólo pregunto el por qué, cómo en apenas segundos cuándo te vi la cara, te comencé a querer… Y solo tú haces que llore riendo, haces que ría llorando y me pregunto cómo algo tan pequeño puede invadir, la caja de mis recuerdos, los que yo apenas recuerdo si tú no estás en ellos. Solo tú…
Sus ojos están cerrados. Su mano, la que envolvía mi dedo, se ha relajado. Ahora permanece sobre el pequeño colchón. Vuelvo a taparla, mis labios besan su frente. Tan pequeñita, cómo ella. Ahora Kyle no podrá llamarme pequeña, ya no. Mis comisuras se elevan, aunque mis ojos se humedecen. Lo echo mucho de menos. Hace un mes que no lo veo. Hace un mes que no me ve. Ni en un día como hoy. Pero sé que lo veré. Y no lo digo por mí, sino por su pequeña. Por nuestra pequeña.
-Buenas noches, Iria. –Susurro, para no hacer el más mínimo ruido y que se despierte. -Te quiero.


Sé que quizá tendréis muchas preguntas después de leer esto, así que si tenéis que hacerlas, hacedlas aquí; http://ask.fm/remembermenovela Aunque la mayoría de preguntas, no podré resolverlas, pues se irá viendo con el paso de los capítulos, pero intentaré daros alguna pequeña pista o responder sin desvelar mucho. Sobretodo necesito OPINIONES, para saber si os gusta, que es lo que tendría que cambiar... Podéis darlas en el Ask, en las páginas de Facebook en las que se publique el enlace, o aquí debajo, siendo usuarios de Blogger.
MUCHÍSIMAS GRACIAS, por las visitas, las opiniones, los MG.. ¡Por todo! ¡SE OS QUIERE NADINNES!